lunes, 18 de mayo de 2020

Un hogar en mis recuerdos

Sueño con vosotros, a menudo,
Y, por un instante,
En la eternidad del sueño en que no existe el tiempo,
volvemos a estar juntos.
Y no importa si estoy dormida o despierta,
Porque sé que no os habéis ido,
Porque escucho vuestros pasos, vuestras voces,
Porque os veo y sé que estáis conmigo.
Y aunque sólo salís cuando duermo,
Sé que seguís aquí porque os construí
Un hogar dentro de mis recuerdos:
Una cocina donde siempre huele a croquetas,
Un salón con todas las ventanas abiertas,
una habitación con olor a jazmines en la mesita
Y un cuarto de baño con tu gel de vainilla.
Y un porche que te espera lleno de hojas secas
Tu cortaúñas para cuando voy a verte,
Tu copa llena de carbón y cizco,
Y un pozo con el que regar naranjos y olivos.
Y una mecedora junto a la ventana
Y domingos presidiendo una mesa de continentales y poquinos
Y Nochebuenas con disfraces,
Y tus bonsais y tus matas de pistachos
(Me recorrí medio Cairo sin encontrarlos,
Algún día los cultivaré por ti).
Y un charco de agua bajo la morera,
El zumo de una naranja chorreando por tus brazos,
Disfraces con cualquier trozo de tela
Y la ilusión incansable de la inocencia.
Por todo esto sé que no os habéis ido,
Porque nunca pasa mucho tiempo
Sin que paséis a visitarme
Como si quisierais aseguraros de que no os olvido.
Y sé que nunca os dejaré marcharos,
Porque si os vais, vuestro hogar (que es mi alma),
Se queda vacío, cerrado a cal y canto,
Y ya no olerá a croquetas ni a césped recién cortado
Ni resonarán en sus rincones las risas,
ni habrá en la piscina ruedas de camión y sandías,
Ni cancelas abiertas
ni ese vestido tuyo lleno de florecitas chicas.
Y todo estará a oscuras y, entonces ¿qué haré yo?
Por eso, no os olvido y sé que no me habéis dejado,
Seguid visitándome mientras duermo
Venid y quedaros a mi lado,
Aunque sea en mis sueños
Donde podemos estar juntos allí donde no existe el tiempo.

...hasta que volvamos a vernos...

No hay comentarios: