domingo, 23 de septiembre de 2012

Azúcar

Después de probar un beso de tus labios,
el azúcar más puro me parece edulcorado e insaboro.

8 de Septiembre

viernes, 21 de septiembre de 2012

Y entonces, llegaste tú

Hace mucho que no tenía (ya) nada que contar.
Y entonces, llegaste tú,
trayendo la luz en tu sonrisa
y un revolotear de mil pájaros en tu pelo.
Y llegaste tú, haciéndome sentir bien conmigo misma,
haciéndome sentir que merecía la pena,
aunque no fuera más que un encuentro fortuito (probablemente) irrepetible.

Y entonces, llegaste tú.
Y creo que, tal como llegaste, te irás,
pues apenas duran unas horas, a veces pocos minutos,
los sueños que más me han llenado.

Y tú, pareces, cuando apareces,
que traes todo lo que siempre he querido, en tus manos.
Por eso no espero, pues no me lo permito, pensar
que te vas a quedar a mi lado,
aunque mi lado sea a varios cientos de kilómetros.

22 de agosto de 2012

jueves, 20 de septiembre de 2012

Por fin

Por fin.
Por fin las máscaras, empiezan a caer.
Y ni siquiera hacen falta ríos de rimmel cara abajo.
Por fin.
Por fin el camino sigue
y ni si quiera hace falta mirar atrás.
Porque atrás, no hay nada.
Porque el atrás es como un vacío,
vacío de cualquier cosa que merezca la pena recordar.
Por fin.
Por fin he pasado a ser alguien de quien un día hablarás
no sé si con más cariño que rencor
o con más odio que cariño.
Por fin.
Por fin mereces ser llamado con esa palabra que tanto te gustaba usar.
Eres la contradicción en sí misma.
Ojalá todas esas personas que un día te creyeron
acaben por conocerte.
Como un día
lo hice yo.

18 de Agosto

miércoles, 19 de septiembre de 2012

10 Hábitos Nocivos para el Cerebro


Los diez hábitos mas nocivos para el cerebro
de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud:
1.- No desayunar.
2.- Sobre-alimentarse.
3.- fumar.
4.- Consumir demasiados azúcares.
5.- Contaminación.
6.- Dormir poco.
7.- Cubrirse la cabeza mientras se duerme.
8.- Pensar demasiado en etapas de enfermedad.
9.- Falta de pensamientos estimulantes.
10.- Hablar poco.

Quiero creer

Quiero creer.
Quiero creer en algo que aún no existe,
que aun no es visible
más allá que con los ojos infinitos del pensamiento.
¿Será esta la cántara de la lechera?
¿Sabré ver las piedras a tiempo?

Te echo de menos,
no quiero echarte de menos por siempre,
mantengámoslo en apenas este tramo.
Y sigamos el camino de baldosas amarillas.

22 de agosto

lunes, 17 de septiembre de 2012

Conformarse

¿Conformarme?
No, gracias.
Que bastante tiempo tendré para ello
cuando hayamos muerto.


14 de septiembre

domingo, 16 de septiembre de 2012

Te Creo

Por alguna razón te creo. Creo que es porque quiero creerte. Aunque una parte se ahogue en gritos de desesperación, intentando llegar a mí, a mis oídos - intentando evitar lo que probablemente sea no menos que una catástrofe. Aunque otra parte de mí desee que sea verdad, que aún existan personas que puedan suscitar en mí una llama de esperanza, de que no todo está perdido, de que todos ellos se equivocaban.

Por alguna razón, te creo.
Creo que no tengo más remedio que creerte.




20  agosto

viernes, 14 de septiembre de 2012

Hace dos años, un día como hoy

Hace dos años, un día como hoy, aún no te conocía, pero ya sabía de ti, conocía tu nombre y conocía tu fecha de nacimiento. Y, sobre todas las cosas, sabía que te querría. Pero no tanto.
Hace dos años, un día como hoy, aún no te había visto la cara, más que a través de una imagen en blanco y negro, ni te había visto reírte y nisiquiera llorar. Sin embargo, sabía que serías motivo de felicidad cada día de cada mes de cada año a partir de entonces.
Hace dos años, un día como hoy, ya estaba todo listo para tu llegada, pero nadie sabía ni imaginaba ni esperaba qué sentiríamos al verte llegar, envuelto en toallas blancas, con los ojitos cerrados y ese primer llanto.

Hace dos años llegaste a nuestra vida
y con eso conseguiste que yo, la mía, no la quiera cambiar por ninguna otra.
Pues, de otra manera, no sería tu tía.

Felicidades, Alejandro (mochuelo chico)
Te quiero


(4 de Agosto)

jueves, 13 de septiembre de 2012

Formalismos para ser

Toda la vida he deseado ser escritora
pero ¿qué he hecho para conseguirlo?
- Realmente nada, "sólo" escribir -
¿cuánto tendré que esperar

para dejar atrás la cobardía
y enfrentarme a lo que más miedo me da?
¿Cuándo decidiré que ha llegado el momento
de transformar todas esas taquicardias
en palabras - legibles, palpables, visuales?
No sé, creo que quizás nunca lo consiga.
No sé, creo que quizás nunca lo intente.
Sin embargo ¿cuál es el camino correcto para ello?
Y lo que es más importante ¿En qué consiste?
¿Basta con sentirlo? ¿Con creer que se es?
¿Aun cuando lo escrito - y lo descrito -
no aparezca más que muy de vez en cuando?
¿O son necesarios los formalismos,

el reconocimiento, la aceptación de tu fruto por 
todos aquellos ojos ajenos?
¿Podría ser escritora por el simple hecho de escribir
aunque nadie lo lea? ¿O puedo serlo sólo haciéndoles creer
que lo que escribo, aún a solas, 
pueda merecer la pena?

Nunca me han quedado claras
las diferencias
pero a fin de cuentas
esto debe ser como el matrimonio:
un sentimiento, una necesidad 
- de sacar cosas de dentro - 
de expresar, de forma pública o en la intimidad,
algo que llevamos en el corazón,
en las entrañas,
en la parte más tierna del intelecto.
Un "algo" que va contigo
hasta que la muerte nos separe.

Aquella puerta

La misma ráfaga
que cierra aquella puerta
de un portazo

puede hacer que la corriente
abra aquella ventana
de par en par.

Aprende a quitar
los cerrojos,
las cerraduras,
los candados.

martes, 11 de septiembre de 2012

lunes, 10 de septiembre de 2012

Nueve letras

Cuatro cifras,
dos números,
dos puntos
y tu nombre de nueve letras
apoderándose del espacio.
Eso, a fin de cuentas,
es todo lo que me queda
de ti:
Tu nombre en blanco
sobre la pantalla negra;
tu nombre en blanco
de nueve letras...

domingo, 9 de septiembre de 2012

sábado, 8 de septiembre de 2012

Compro sueños rotos


Yo, a estas alturas,
me podría hacer de oro.
Sin embargo, prefiero mantener las trazas
de todo aquello que fue,
de todo aquello que no fue,
antes que barriendo los recuerdos
y dejando tan sólo el olvido
sea precisamente eso
todo lo que me quede
para alimentar
todo aquello que fue
y todo aquello que no fue.

viernes, 7 de septiembre de 2012

Vaivenes

Los mejores escritos son aquellos impulsados por los latidos
de un corazón roto. El mío se ha roto tantas veces
que ya no me molesto ni en recomponerlo.
Después de todo, algo que ya ha estado roto,
nunca vuelve a ser lo mismo.


Sin duda alguna, los mejores escritos nacen como fruto del dolor.
Algo que a estas alturas he aprendido a controlar (o eso creo).
Han sido tantos los palos sufridos estos últimos años...
tantas pérdidas... como amputaciones a mi propia alma.
Hace tres años ya de aquella que me devastó por dentro.
Y parece que fue ayer cuando me despedía de ti
entre aquellas paredes blancas.


La vida te da, sin embargo, una de cal y una de arena.
Una pérdida y un reencuentro,
una muerte y un nacimiento,
una puerta cerrada de un portazo
y otra abierta con una corriente de aire.

Ahora recuerdo esa conversación ya olvidada
(ironías de la vida, para los que somos incapaces de olvidar,
enterrar un recuerdo debajo del todo es lo más parecido al olvido)
en la que me preguntabas en cuántos trozos se podía romper un corazón.
Nada es más pequeño que el polvo, te respondí.

Me pregunto cómo te irá todo.
Aunque creo, por ahora, me quedaré sin saberlo.

martes, 4 de septiembre de 2012

Idos

Ya no está,
ya se ha ido.

¡Anda, como tú!
Que ya no estás,
porque te has ido.

¿Y qué?
- te preguntarás,
vocecita,
dentro de mí -

¿Y qué?
Y qué, que ya no esté
y qué, que se haya ido...

Y qué, si sigue ahí,
en ese recuerdo,
recuerdo tan nítido
como el cristal
de aquella botella
de vidrio
sólo rellena de latidos
del agua
que compartimos
para aplacar
la sed
producida
por un beso.

Un beso
que tampoco está,
que también se ha ido.

¡Anda! Como tú...

sábado, 1 de septiembre de 2012

Sigues sin existir

He vuelto a perder la fe.

Tú, sigues sin existir.
Pero sólo tú.
Sin embargo, sigo rodeada de todos los demás.

Tú, sólo tú,
sigues sin existir.

Y parecías tan real.