viernes, 6 de marzo de 2015

Quiero entrar en MHYV

He decidido que voy a hacer el casting para el programa "Mujeres y Hombres y Viceversa". 
Sí, sí, tal como lo lees. 
Si es un filón de oro, aunque tendré que hacer algunos cambios básicos en mi vida. Para comenzar, hempesar a escrivir asi. Supongo que podría adaptarme supongo q podria adaptarme. Kuestion d practik.
Os estaréis preguntando que cómo se me ha ocurrido semejante idea. No sufráis, que os lo cuento ahora mismo. Resulta que ayer, durante unos breves instantes, miré a los ojos a Telecinco cuando estaba en antena el programa Gran Hermano VIP (GHVip en adelante) y se me encendió la bombilla de las ideas y empecé a elucubrar en qué programa podría entrar y qué recorrido profesional podría tener en cada una de ellos. Entonces llegué a la conclusión de que lo mejor era realizar un combo. Como mi ideal es llegar a GHVip y ganar un pastizal por dar unos cuantos gritos, lloriquear, criticar y andar en un pijama de leopardo lila todo el día, finjiendo bajadas de azúcar pero aún no soy conocida en esos mundillos, lo ideal va a ser "MHYV" donde sólo te piden una cara bonita (tapada con unos 600 gramos de maquillaje), un pelo brillante (puedo utilizar extensiones) y un cuerpo cuidado (he empezado a correr y siempre quedan las fajas). 
Y eso sí, ya una vez llegara a GHVip, que es mi propósito en la vida a largo plazo, para el que me voy a preparar desde ya con ejercicios diarios como los explicados apenas unas líneas más arriba, podría empezar a forrarme a razón de unos miles de euros al día, más el premio final si lo consiguiera o, a unas malas, las galas y los platós concediendo entrevistas, exclusivas, a los que le seguirían las exclusivas de mis propias novedades vitalicias. ¿No lo veis? Si es que es un plan redondo, no puede fallar, lo mires por donde lo mires.
Yo no espero ganar los 65,000 euros semanales de la Esteban, porque no soy la princesa del pueblo ni los 50,000 de Kiko Rivera DJ, porque no soy hija de una tonadillera y hermana de otra famosilla de tres al cuarto (jamás osaría ponerme a la altura de tales semidioses mediáticos), yo que soy mucho más humilde, me conformo con unos cuantos miles al mes. Faltaría más. Si es que hay que entender que ser el hijo de una tonadillera o la ex de un torero tiene su trabajo, no se crean, que eso de levantarte por la tarde, tenerlo todo hecho, que por la calle te persigan las cámaras debe ser harto cansado (aunque luego no les importe airear su privacidad en un programa con cámaras 24 horas). Por todo esto yo nunca podría compararlos con un bombero, un policía, un profesor, un médico, un agricultor o un ganadero, que sólo nos educan, nos curan, nos salvan, nos protegen (en muchos casos) y cultivan/crían los alimentos de los que vivimos. Por ende, sus sueldos deben ser en proporción, mucho menores a los de la princesa y el DJ.

En resumen, que yo, lo que quiero en la vida, es tener una relación con un famoso (algo que me facilitaría probablemente entrar en MHYV) o ser la ex del hijo de o haber salido en la tele, aunque fuera de extra entre el público. Que eso me tendría la vida resuelta. Y entonces ¿quién quiere estudiar, culturizarse, formarse y dedicar su vida a una profesión digna cuando se puede tener un niño con x y lucrarse el resto de su vida? Pobres niños míos, que son para sus padres como una cuenta en Suiza, que se infla, se infla, se infla... y te mantiene toda la vida. Un negociazo, señores.

Así que si alguien sabe cuándo son los castings, avisadme, ke yo empieso a escrivir asi, me pongo aros, me maquillo como nunca y me dispongo a perder la dignidad pavoneándome por los platós contando cosillas... curiosas... perdiendo un poquito la dignidad y viviendo de ello. Pero eh, no le digáis a nadie que tengo una carrera, que sé idiomas, que he viajado y conocido culturas, que esos aquí en España son ciudadanos de segunda y los que realmente se merecen la admiración y el respeto del país son precisamente esos personajes ninis profesionales, sin cultura (ni, en muchos casos, educación) cuyo mayor mérito es el de no haber hecho absolutamente nada de provecho en su miserable vida.

Bueno, os dejo, que voy a salir a buscar pantalones de cuero, camisas de leopardo y una barra de labios rosa neón que resalte en mi piel bronceada y mi pelo rubio platino.

BESIS.


martes, 3 de marzo de 2015

"The Spectacular Now"

"¿Qué ha aprendido de todo ello y como le ha preparado para el futuro?
Reto, dificultad, futuro...

Me llamo Sutter K. y tengo 18 años. Si me comparo con otros chicos, no he tenido tantas dificultades. Me han ocurrido mierdas... Bueno, me han ocurrido cosas, eso seguro, pero es algo que siempre le pasa a todo el mundo ¿verdad? Pero el verdadero reto de mi vida, mi verdadera dificultad, soy yo. Siempre he sido yo. Hasta donde puedo recordar siempre he tenido miedo: miedo al fracaso, a decepcionar a la gente, a hacerles daño, a que me hicieran daño. Pensé que si mantenía la guardia y me centraba en otras cosas, en otra gente, si conseguía no sentir siquiera, tampoco sentiría ningún dolor, pero la fastidié. No sólo bloqueé el dolor, también bloqueé el resto de cosas, lo bueno y lo malo. Hasta que no quedó nada.
Está bien vivir sólo el momento pero la mejor parte del momento es que habrá otro mañana y voy a conseguir que merezca la pena.

Atentamente, 
Sutter K."

lunes, 2 de marzo de 2015

Pause

No sé qué escribir, pero presiento que es justo lo que más necesito en estos momentos.
Que lo he sentido cuando recogía la ropa seca del tendedero, en esta tarde de otoño tan de primavera, sin serlo aún, con ese cielo que parece arder enviando el fuego que no quema las cortinas de la habitación, cuando la brisa fuera te hace despejar toda la niebla de los siguientes tres años.
Creo que la necesidad está escondida bajo esta imperiosa fuerza que me empuja.
No sé para qué, ni qué, ni en qué, pero sé que no es una opción.
Decir que siento mi vida en pause, aquí, sin más contexto, quizás fuera un poco dramático.
No vendría a cuento.
Ni siquiera intentaría explicar el por qué.
La razón es que parece que estoy en un sueño, no por la belleza del momento, sino porque veo las cosas pasar pero no reacciono ante ellas (ni alegría, tristeza, ira ni aflicción), no siento nada, sencillamente las veo pasar desde fuera. Y no sé cuál es el siguiente paso.
Así que imagino que algo debo estar haciendo mal, para que la vida se me pase indiferente. Y no sé qué es, aunque intuyo que mi zona de confort está llena de agujas llenas de anestesia, sin capuchón y esparcidas por el suelo a su suerte...

(Incompleto)